México, 07 mayo.- En el país 60.5 por ciento de las mujeres trabajadoras tiene más de 46 años, lo cual indica que están a menos de dos décadas de jubilarse, aunque podrían enfrentarse a un panorama sombrío al momento de su retiro, advirtió la Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro (Amafore)
En el marco de la celebración del Día de las Madres, el presidente del organismo, Carlos Noriega, dijo que factores como la disparidad salarial entre hombres y mujeres, menores períodos de cotización, así como un escaso ahorro voluntario, pueden cerrarles las puertas para obtener un ingreso que les permita tener un retiro tranquilo.
“La imagen de la madre mexicana, dedicada a las labores del hogar y a la crianza de los hijos, ya está rebasada; la Encuesta Nacional de Educación y Empleo revela que 27.9 millones de mujeres trabajadoras son madres, de las cuales 97.7 por ciento combina sus actividades fuera del hogar con los quehaceres domésticos”, refirió.
Mientras que según datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), de las 53 millones de cuentas administradas por las Afores, 39 por ciento son de mujeres, de las cuales, 46 por ciento tiene más de 40 años, es decir, están a poco más de dos décadas de jubilarse.
El presidente de la Amafore comentó que debido a que la esperanza de vida de las mujeres hoy es mayor que la de los hombres, el ahorro que acumulen durante su vida laboral tendrá que alcanzarles para más tiempo.
No obstante, su jubilación tendrá como base de cálculo, en términos generales, un tiempo laboral menor que el de los varones, es decir, menor densidad de cotización y de recursos, indicó en un comunicado.
El actual esquema de pensiones establece un mínimo de mil 250 semanas de cotización para jubilarse, pero debido a que un alto porcentaje de las mujeres se dedica a empleos informales de ventas o promoción en pirámide, es muy probable que no las alcance.
Por ello, insistió en que es urgente realizar un diagnóstico adecuado para diseñar un sistema de seguridad social universal que brinde cobertura a ese sector que hoy no cuenta con una pensión, y que es un grave problema socioeconómico para un grupo de población creciente.
“La situación se va a profundizar porque estamos viviendo una transición familiar, pues cada vez hay más mujeres que son jefas de familia, y si esa mujer cabeza de familia no tiene un trabajo formal, no tendrá pensión”, explicó el presidente de la Amafore.
Consideró importante que se reconozca la labor de las madres mexicanas y que, en un estricto sentido de justicia social y familiar, se apoyen para que puedan tener un retiro tranquilo y disfrutable.
Además de la tendencia poblacional, debe considerarse que las mujeres tienen menores oportunidades para conseguir mejores empleos, e independientemente de su nivel educativo, perciben salarios inferiores a los de los hombres.
Y es que de acuerdo con datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la brecha salarial entre hombres y mujeres es de 22.9 por ciento.
En tanto que “la problemática se agrava para las mujeres que, aun estando dentro del sector formal clásico, no tienen prestaciones por ser contratadas por honorarios o por empresas outsourcing”, apuntó.
