El uso correcto de la mochila es formativo

EL USO CORRECTO DE LA MOCHILA ES FORMATIVO

Por: Eusebio Ruiz Ruiz.

Hace algunos días se dio a conocer que el aspirante a la diputación local por el Distrito 15 de Victoria, Alfonso Méndez elaboró una iniciativa de reforma a la Ley de la Educación, esto con el objetivo de prohibir la mochila en las escuelas de educación básica, en Tamaulipas.
Rescato lo que el aspirante a diputado utilizó como argumentos:

El cargamento que soportan los niños causa daños en la salud, provoca malformaciones en la columna vertebral, por cargar en sus espaldas de 5 a 10 Kg. diariamente.

Es obsoleto asistir con los materiales escolares.

La reforma a la ley también contiene el diseño de lockers para el resguardo de los materiales que los alumnos requieren durante el horario escolar.

Con la prohibición de la mochila se contribuye a una mejor seguridad escolar. Se eliminarían los operativos mochila, que son una manera de invadir la propiedad ajena. Cuando a los menores se les solicita una revisión ya los hace sospechosos de algo, esto resulta incómodo y molesto para los padres de familia.

La prohibición de la mochila escolar agilizará la incorporación del sistema digital educativo, el uso de las nuevas tecnologías adquiere cada día mayor importancia.

Hasta aquí lo que dijo el Coordinador de Afiliación del PT en Tamaulipas.

¿Qué se puede decir en relación con lo que afirma Poncho Méndez?

El uso incorrecto de la mochila escolar sí causa daños en la espalda, hombros y cuello de los niños y jovencitos, además puede provocarles caídas y en espacios reducidos golpear con sus útiles a otras personas.

La comunidad científica internacional coincide en que un niño no debe cargar más del 10 al 15 por ciento de su peso corporal, si la mochila se sobrecarga hay consecuencias negativas.

Sin embargo, no hay que ser tan radicales ni tan novedosos, menos si se es por motivos políticos. El uso de la mochila es necesario, no todos los útiles escolares se pueden dejar en la escuela, hay tareas, preparación para los exámenes, elaboración de proyectos y agregue cualquier actividad extraescolar, todo eso implica llevar y traer.

Un casillero en el aula es de mucha ayuda, pero no sustituye a la mochila escolar.

La carga excesiva de libros, cuadernos y otros materiales se puede evitar cuando se tiene un horario de clases y este es respetado por directivos, maestros y alumnos, de esta manera se lleva a la escuela únicamente lo necesario.

Directivos y docentes deben ser capacitados para que instruyan a los alumnos y a los padres de familia en la elección de la mochila adecuada y su uso correcto. Un médico, un fisioterapeuta, un licenciado en educación física puede orientar en esto, incluso cualquier maestro puede hacerlo, no requiere de mucha ciencia. Si se quiere, se puede.

En lugares estratégicos de la escuela se pueden colocar imágenes de cómo debe ser la mochila y la manera de usarse, los instructivos para cada alumno son otra manera de orientar.

De vez en cuando el alumno debe revisar su mochila para liberarla de lo innecesario, no sea que aún esté guardado el lonche de la semana pasada, no exagero en lo que digo, en el aula fui testigo varias veces de eso, el mal olor los delataba, para todos era un rato divertido en el salón.

Una mochila apropiada y su uso correcto evita daños en la salud, no es necesario prohibirla.

El ejercicio físico y el deporte son importantes, si no hay esto, cualquier cosa ligera que cargue el niño le causará daño, la vida sedentaria no ayuda en nada.

Cargar una mochila escolar de manera correcta no es solo uso de fuerza física, implica también conocimiento, responsabilidad, organización, hábitos saludables, higiene, práctica regular de ejercicio físico y saber cómo cargarla. Por eso digo que el uso correcto de la mochila escolar es formativo para los alumnos y de paso para muchos padres de familia.

Vivimos en una sociedad en la que el derecho a la paz está ausente, la inseguridad es evidente, por esta razón la operación mochila es necesaria, es una medida preventiva, no hay que ser tan finitos y delicaditos en este asunto, al final de cuentas es la seguridad de todas las personas que están en la escuela, incluso los lockers deben ser revisados, también ahí se pueden guardar objetos no convenientes.

Para revisar bien la mochila no es necesario que el que revisa meta las manos, el alumno puede abrir los compartimentos y mover o sacar lo que hay en el interior, lo que se necesita es paciencia y darse el tiempo.

La operación mochila también es formativa, ese niño está cooperando con la autoridad buscando el bien para él y de todos los que están en su escuela. Cuando sea adulto y se tope con los operativos de seguridad tendrá claro que lo que se busca es el bien de la sociedad. Si viviéramos en paz no tendríamos necesidad de todo esto, pero la realidad es otra.

Mochila escolar y medios digitales no están peleados, se complementan, para que el niño aprenda a escribir la A y su minúscula se necesita el cuaderno y el lápiz, eso le permitirá ubicarla en el teclado de la computadora. El uso de la tecnología se puede agilizar, la mochila y los útiles en su interior no lo impiden, el impedimento está en nuestro pobre y decadente sistema educativo y en las carencias materiales que tienen las escuelas y las familias.

Algo más, el papá o la mamá no le deben cargar la mochila al niño, que la cargue el hijo, el esfuerzo es formación, hacerle las cosas que él debe hacer los debilita, los hace blanditos.

Sugiero que esta tarea de orientar sobre el uso correcto de la mochila escolar se deje a los directivos y al personal docente, lo saben hacer, tienen la capacidad y conocen la realidad de su escuela; no es necesario andar modificando leyes para prohibir la mochila.