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Decálogo para fracasar en el matrimonio

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Decálogo para fracasar en el matrimonio

Por: Eusebio Ruiz Ruiz.

Cuando alguien contrae matrimonio, civil y/o religioso, le llueven felicitaciones y buenos deseos, aunque éstos no siempre se hacen realidad. De la pareja depende la felicidad o la infelicidad, los casados son los únicos responsables del éxito o fracaso, dicen que las suegras también influyen mucho, sin embargo, el que intervengan o no, dependerá de los esposos.

Para los cónyuges, o los novios que algún día quieren llegar al matrimonio, si entre sus planes está el arruinar sus vidas, decídanse a poner en práctica el decálogo para fracasar en el matrimonio, ya llegará el día en que el objetivo se cumpla, de paso quedará muy lastimada la vida de otros, heridas graves y permanentes se habrán ocasionado.

Aclaro que cuando hablo de matrimonio es entre un hombre y una mujer, no esos simulacros de matrimonio que hoy algunas leyes permiten.

No me tome a mal estos 10 puntos, mi intención es que reflexione y nunca arruine su matrimonio ni la vida de sus familiares, al contrario, yo soy de los que pienso que el matrimonio y la familia son sagrados y de institución divina.

  1. Si andas en la etapa del noviazgo no respetes a tu pareja, trátala como cualquier cosa u objeto, no tomes en cuenta su dignidad.  Si ya estás casado toma la misma actitud, de esta manera estarás poniendo el primer “granito de arena” para que todo se venga abajo.
  2. Cuando ya pienses casarte, ten la idea clara de que algún día llegará la separación o el divorcio, si ya estás casado nunca será tarde para pensar en el rompimiento. De paso practica la infidelidad y la separación se acelera. Al fin que a todo le cambiamos de nombre, por ejemplo, al adulterio, a la infidelidad y al divorcio, ahora le llamamos “rehacer la vida”.
  3. Jamás perdones ni pidas perdón. Cualquier ofensa que recibas de tu pareja, por pequeña que sea, no la perdones, si eres la parte ofensora no pidas perdón, perdonar o pedir perdón es para gente débil.
  4. De un problemita en tu noviazgo o en tu matrimonio, de esos que se resuelven casi solos, hazlo grande, magnifícalo, conviértelo en un problema sin solución, para que día a día se acreciente más, hasta que todo reviente.
  5. Olvídate de Dios y del amor. A Dios sácalo de tu matrimonio y de tu familia, total con todos sus mandatos estorba. En cuanto al amor, no lo tomes muy en serio, ya ves que hoy se dice que es cuestión de química, mejor piensa como Nietzsche, él decía que lo mejor era odiar al prójimo, en este caso a tu pareja. Manifiesta tu odio hablando mal y criticando a tu pareja, también criticando a tus parientes políticos.
  6. Ciérrate al diálogo, no te comuniques, impón tu ley, no andes con medias tintas, que en tu casa se haga únicamente lo que tú dices, así mostrarás tu fuerza.
  7. Castiga a tu pareja en lo físico, y si no te atreves porque te pueden demandar, entonces hazlo en lo psicológico, en lo moral y en lo sexual.
  8. Aprovecha las crisis: No desperdicies las crisis económicas, son un buen pretexto para ponerte tenso, preocupado e irritable, descarga todas tus tensiones en tu pareja. Si ya andas alrededor de los 40 años, aprovecha también la crisis natural y psicológica que se presenta en esta edad, se infiel y demuestra que todavía la haces.
  9. Procura no estar en tu hogar, cuando te toque la de malas y tengas que estar con tu familia compórtate de tal manera que nadie te soporte.
  10. Decídete a dejar a tu esposa o esposo, los pasos ya están dados, avienta todo a la basura: familia, principios, leyes, religión, moral, educación y también a Dios, ya todo sale sobrando, ya se cumplió el objetivo: Tu matrimonio ha fracasado. Por andar en la lumbre ya te quemaste, ya nada podrá ser como en los buenos tiempos.

Claro, si quiere que su matrimonio no fracase, entonces piense y actúe de manera contraria a este decálogo, el resultado será el éxito, tendrá una familia integrada en la que formará seres humanos completos, maduros, positivos, estará colaborando en la construcción de una sociedad mucho mejor.

Mi invitación es que en el noviazgo y en el matrimonio no se comporte de acuerdo a este decálogo, sino que en su vida matrimonial y familiar elabore sus 10 mandatos para vivir de la mejor manera, porque recuerde la familia es la célula básica de la sociedad, y si ésta última anda muy mal es en buena medida porque muchos no han sabido valorar la bondad y la santidad del matrimonio y la familia.