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2020: Doña Leona

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2020: Doña Leona

Una taza y dos de cultura

Por: Sergio Arévalo

2020: Doña Leona

Año nuevo, actitud nueva ¿no? Esa es la intención.  El año pasado sin duda estuvo lleno de información, el movimiento feminista fue (y aplaudiré siempre) uno de los principales temas en los distintos medios de comunicación, por lo que no es de extrañarse que recién se publicara  en el Diario Oficial de la Federación el decreto por el que se declara al 2020 como el año de María de la Soledad Leona Camila Vicario Fernández de San Salvador, como era su nombre completo mejor conocido como Leona Vicario, conocida también como “La mujer fuerte de la Independencia”, y considerada la primera periodista del país. 

¿Quién es ella? ¿También amiga de Frida? Y es que al parecer cuando hablamos de  mujeres representativas de México se cuentan con los dedos de la mano, y no, existen grandes mujeres en la historia de México, un ejemplo es sin duda  Leona Vicario.

La Guerra de Independencia no sólo tuvo héroes que escribieron las páginas de la historia de México, como Miguel Hidalgo o José María Morelos y Pavón, también las  mujeres fueron parte de esa batalla, hubo heroínas, recordadas lamentablemente poco, tal vez por la mente machista.

Nacida en  Ciudad de México que a pesar de ser mestiza, tuvo las comodidades de una familia criolla de clase alta al ser hija de un respetable comerciante español (money money). Y antes que piensen “así que chiste, no la sufrió”, ella en lugar de vivir una vida cómoda ignorando los problemas de la sociedad buscó dejar su huella en la historia de nuestro país.

Camilia estudió Bellas Artes y Ciencias, desarrolló un enorme sentido crítico frente al mundo a partir de sus lecturas y comenzó a ejercer el periodismo, donde se enfrentó a un mundo rodeado de hombres y donde las mujeres no tenían cabida. Con esfuerzo su trabajo como periodista se publicó en diarios como El Semanario Patriótico Americano y  El Federalista. Mediante informes publicados en el periódico el Ilustrador Americano, tuvo una comunicación clave con los llamados “rebeldes”, que no eran precisamente haters de la épocasino aquellos que buscaban ya un cambio en la nación.

En 1813 fue encarcelada al descubrirse que era conspiradora y apoyaba el movimiento de Independencia, pero con ayuda pudo escapar y refugiarse en Oaxaca. Tanto a ella como a su esposo se les ofreció el indulto a cambio de abandonar el movimiento, pero no lo aceptaron (esa es la actitud, no “rajaron”), por lo que siguieron huyendo por un buen tiempo.

No es la primera vez que a Leona se le hace un homenaje, a principios de los años 80 se realizó una telenovela transmitida por Televisa protagonizada por Diana Bracho contando la historia de una joven de la alta sociedad que se hizo célebre por contribuir de manera singular a la causa insurgente durante la lucha por la Independencia de México

Si nos interesa conocer más de ella, existen una serie de libros donde narran su vida y obra, como Leona Vicario, la insurgente de Eugenio Aguirre (1986), Leona Vicario: heroína de la independencia (1997), La insurgenta (2010), Leona (2007), entre otras publicaciones. No hay excusa para no saber más de esta admirable mujer.

Leona Vicario murió el 21 de agosto a los 53 años de edad. Antes de cumplir 50, escribió en su testamento que estaba sana, pero su cuerpo “resentía la larga lucha, el hambre, el cansancio y la desdicha que había padecido durante los años de guerra”, jamás arrepintiéndose de lo realizado, y marcando un antes y un después de la presencia de las mujeres en la historia de México.  Año nuevo, actitud nueva ¿no? Esa es la intención.  Juntos podemos cambiar como sociedad, pequeñas acciones hacen grandes cambios.