LA PLUMA ENVENENADA
Periódico Metrópoli
Hablemos claro, como le gusta a la gente, en Tamaulipas con mal gobierno y altísimos niveles de inseguridad, y con un Estado de Derecho resquebrajado, gracias a las acciones y omisiones de políticos sinverguenzas, viven miles de ciudadanos en pobreza, en una franca desigualdad y con un futuro en donde lo único seguro son años de hambre, explotación y violencia.
A la degradación de nuestro estado, en todas las áreas de la vida pública, los que han abonado con mayor énfasis son los cínicos políticos, para ejercer esa actividad hay que tener, de entrada, altos niveles de desvergüenza e inmoralidad.
Hoy, como nunca antes, los políticos llenan las páginas de los periódicos, noticieros y sitios de Internet como protagonistas y cerebros de fraudes, corrupción e incluso asesinatos… Los hay de todos los cargos, de todos los partidos, de todas las regiones.
Del otro lado, las historias de Tamaulipecos violentados, despojados de sus tierras, molidos a golpes, desaparecidos, encarcelados, muertos a manos de las propias autoridades y por acción y omisión de los políticos son el pan de cada día.
A diario mentamos madres contra ellos y nos preguntamos hasta cuándo se les pondrá en el lugar que merecen [la cárcel, por lo menos]. Pero dejar la indignación a nivel de las mentadas no alcanza para batallar contra ellos. Son las acciones de la mayoría, de la sociedad civil unida, las que pueden combatir a esa plaga que, escudada en las siglas de partidos y nomás porque les da la gana, abusa contra la gente.
El próximo 5 de junio, Tamaulipas irá a las urnas para renovar Gobernador, Presidentes Municipales, Diputados Locales, y hay en ese proceso una nueva oportunidad para que la ciudadanía muestre su hartazgo con el voto, hasta ahora la única herramienta de cambio democrático que tenemos los Tamaulipecos y que debe usarse para mandar hasta allá, muy lejos, a los políticos corruptos y abusones.
El de junio es el experimento para lo que vendrá después: la elección federal de 2018, en la que la ciudadanía también tendrá oportunidad de pasarles facturas por la enorme cadena de agravios que acumulan, escudados en una profesión ahora despreciada y despreciable.
En Tamaulipas, el ser político es la mejor profesión que uno puede elegir, ya que los requisitos y el esfuerzo a realizar son mínimos, sin ninguna evaluación puedes recibir aumentos considerables de dinero, la condición de los políticos es la corrupción e impunidad, no existen controles para evitar esta corrupción, ya que estos son dados por ellos mismos, existe un alto grado de conflicto de intereses que nadie quiere romper.