El diputado Gerardo Aguado Gómez, solicitó al titular de la Secretaría de Salud Federal que en coordinación con las autoridades sanitarias locales y las instituciones de salud, implemente un sistema de información nacional que diariamente informe con seriedad acerca de las personas diagnosticadas con neumonía atípica, influenza y otras enfermedades de síntomas similares al coronavirus (Covid-19)
La Ley General de Salud establece en el Artículo 136 que es obligatoria la notificación a la Secretaría de Salud o a la autoridad sanitaria más cercana, inmediatamente, en los casos de cualquier enfermedad que se presente en forma de brote o epidemia
Por otra parte, el mencionado ordenamiento dispone en materia de derecho de acceso a la información sanitaria, que se deberá promover el establecimiento de un sistema nacional de información básica en materia de salud.
En la experiencia internacional y nacional, es de sobra conocido que cuando se desata una epidemia, las autoridades sanitarias deben estar preparadas con protocolos, infraestructura y medicamentos suficientes para hacerle frente. Lamentablemente, si esto no sucede, ocurre una crisis sanitaria con escasez de recursos y se opta por sub diagnosticar o dar diagnósticos erróneos a los pacientes, en aras de “cubrir el expediente” y hacer como que se cumple.
Esto genera desinformación, cifras falsas y una falsa percepción de la realidad, mientras la pandemia avanza sin controles eficientes por las regiones del país.
A la fecha presente, diversos actores políticos, partidos e incluso Estados Unidos, han manifestado su preocupación de que el gobierno federal esté maquillando las cifras de infectados por el Covid-19, en un claro intento de aparentar que no pasa nada y que todo está bajo control.
De acuerdo a los organismos internacionales de salud, contar con información oportuna, veraz y transparente en los casos de pandemias y brotes de enfermedades infecto-contagiosas, ofrece las siguientes ventajas:
I.- Ubicación en tiempo real de las zonas y regiones de alto riesgo.
II.- Identificación de los factores de riesgo y los mecanismos de transmisión.
III.- Establecimiento oportuno de protocolos de prevención y contención.
IV.- Implementación de medidas para romper las cadenas de contagio o transmisión.
V.- Adquisición en tiempo justo de insumos médicos, y la contratación de personal especializado.
VI.- Tratamiento oportuno para los enfermos. Y;
VII.- El control de todos los componentes de la crisis sanitaria, para guiar y ajustar día a día los planes y acciones.
Sub diagnosticar o dar diagnósticos falsos a los enfermos de Covid-19 en un afán de control político-estadístico para ocular el fracaso de un gobierno, es una acción que vulnera derechos múltiples, individuales y colectivos.
Dar diagnósticos falsos importa además responsabilidades médico-legales para el personal y para las instituciones, que van desde las de carácter penal, hasta las relacionadas con la de actividad irregular del estado (responsabilidad patrimonial), dando lugar a cuantiosas indemnizaciones para los familiares de las víctimas.
“Solo un eficiente sistema de información sanitaria, que a diario refleje la verdad de todo, nos permitirá como país, como estado, poder realizar en tiempo real y de manera eficiente todas las acciones para hacer frente a esta pandemia” dijo Gerardo Aguado.
Comments are closed.