FACTOR ENTRE DOS
Por: José Efraín Caballero Sevilla
Salario mínimo se sostendrá solo con crecimiento.
La triada conformada por la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami), la iniciativa privada, y el sector obrero, llegaron a un histórico acuerdo, que beneficiará a los trabajadores con un incremento del 20 por ciento en sus salarios para el próximo año 2020.
Este incremento es el mayor registrado en los últimos 44 años y la remuneración para la mayor parte del país pasará de 102.68 a 123.22 pesos diarios, mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte pasará de 176.72 a 185.56 pesos diarios.
Este acuerdo se logro mediante unanimidad de las partes involucradas, lo cual es de subrayarse, ya que refleja la confianza que existe de la política económica gubernamental, en los diversos sectores empresariales.
Quienes se dieron cita de manera destacada, dada la importancia de los gremios económicos son Carlos Salazar Lomelín, presidente del CCE; Carlos Aceves del Olmo, secretario General de la CTM, -quien expresó gran júbilo-, Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, Francisco Díaz Cervantes, presidente de CONCAMIN.
Coincidieron en que quedará superada la línea de bienestar individual (LBI) que calcula el Consejo Nacional de Evaluación en 119 por ciento, marcando una gran diferencia por ejemplo con el 2016 que solo se cubría el 82.3 por ciento del monto del mismo.
Lo importante de este aumento es que en términos reales, si se mejora el poder adquisitivo, ya que la inflación está en un 3 por ciento, lo que significa que los precios se mantienen casi iguales y el capital se incrementa de manera diferenciada.
Haciendo una comparación, en años anteriores, la inflación era superior porcentualmente a los incrementos salariales, lo que estaba haciendo que el poder adquisitivo cada vez fuera menor, y en los últimos 35 años el salario mínimo se redujo en casi un 80 por ciento hasta el 2018.
Cabe indicar que en adelante, el control de la inflación será crucial para que este beneficio económico se mantenga vigente, y deberá haber crecimiento económico, ya que para la anterior política neoliberal fue un gran fracaso en este rubro, cuando debía ser el soporte principal para el éxito que nunca se vio reflejado.
Queda de manifiesto que lo que inicio hace más de 3 décadas con el neoliberalismo económico, de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) no se logró el objetivo.
Citando a Pedro Aspe Armella, secretario de Hacienda durante el gobierno que inicio el periodo neoliberal oficialmente, las acciones primordiales fueron la estabilización de la economía a partir de un manejo “realista” del presupuesto, la desregulación económica, la reforma financiera, la liberalización del comercio, entre otras.
La base teórica de esa estrategia fue proporcionada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) las políticas propuestas, únicamente consideraban restricciones a la demanda, sin tocar la producción, lo que provocó desempleo.
De esa manera gradualmente, se dieron las reducciones permanentes en los sueldos y salarios y en consecuencia, el desempleo y la continua caída de la remuneración de los trabajadores, siendo estos determinantes en la creciente pobreza que dejo de herencia el neoliberalismo.
Por todo esto, la asignatura pendiente que se espera lograr el año entrante por el gobierno federal, es el crecimiento económico del país, objetivo que es importante por lo anteriormente descrito, para seguir manteniendo baja la inflación, pero dadas las megas inversiones que se tienen ya programadas en infraestructura, sumándole el mayor flujo adquisitivo, se espera una reactivación del crecimiento económico para 2020.
Querido lector, tenga un excelente día, nos leemos la próxima.
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