Es la primera visita que la mandataria brasileña efectúa a México en lo que va de sus dos administraciones, aunque será el quinto encuentro que sostendrá con el presidente Enrique Peña Nieto.
La Secretaría de Relaciones Exteriores recordó que la última reunión entre los presidentes Rousseff y Peña Nieto tuvo lugar durante la pasada Cumbre de las Américas celebrada en Panamá en abril de este año, en la que acordaron reforzar y profundizar los vínculos bilaterales y trabajar conjuntamente por una América Latina próspera y en paz.
En México, Rousseff se reunirá con el presidente Peña Nieto, con quien analizará mecanismos para fortalecer la relación bilateral, sostendrá un encuentro con el jefe de gobierno del Distrito Federal y asistirá a una sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión.
México y Brasil representan conjuntamente el 62% del Producto Interno Bruto (PIB) de la región, el 55% de su población y el 55% de su territorio. En 2014, registraron un comercio bilateral de 9 mil 213 millones de dólares.
México invierte en Brasil más de 30 mil millones de dólares, cifra que lo ubica como uno de los principales inversionistas a nivel mundial en ese país.
La SRE señaló que con la eliminación de las visas entre ambas naciones en mayo de 2013, el turismo ha aumentado de manera importante. Mientras que en 2005 se recibían a más de 78 mil turistas anuales de Brasil en México, en 2014 se recibieron cerca de 310 mil.
En materia de cooperación se tienen proyectos en varios temas relacionados con la genética, la investigación forestal, sanidad, investigación pecuaria, agricultura, agronomía, recursos hídricos, prevención de desastres naturales, salud, aeronáutica, energías renovables, telecomunicaciones, silvicultura tropical y comunidades rurales, entre otros.
Durante esta visita de Estado, los gobiernos de ambas naciones refrendarán los lazos históricos de amistad entre Brasil y México, se reforzará el diálogo político, se robustecerá el marco jurídico bilateral que consta actualmente de 21 instrumentos y se anunciarán acciones para maximizar el potencial de incremento del comercio, la inversión y el turismo, expuso la Cancillería.
Además, Brasil y México inaugurarán una nueva etapa de profundización de la relación bilateral en todos niveles y en una amplia variedad de temas, que resultarán en proyectos concretos en beneficio de la creación de empleos, la educación y la generación de oportunidades en ambos países.