El contrato de Patrick Mahomes y su efecto en la NFL

Por: Nazario Assad

Muy pocas veces, si no es que nunca antes, un jugador de la NFL había logrado tener un impacto tan fuerte en la liga, que lo convirtiera en la cara representativa de la liga de manera tan rápida, incluso ya siendo el año pasado la portada del videojuego de NFL más popular del mundo. El originario de Tyler, Texas, y seleccionado en el puesto 10 de la primera ronda del Draft de 2017 por los Jefes de Kansas City, Patrick Lavon Mahomes II, en solo 3 años, de los cuales solo ha sido titular en 2 de ellos, ya que el primero ni siquiera lo jugó por ser su año de novato, es quien ha logrado semejante hazaña y de quien les venimos a hablar hoy, ya que ayer se cimentó, aún más, su rol como imagen de la NFL por muchos años más.

Comprometido con causas sociales fuera del emparrillado, como lo fue recientemente la lucha contra la violencia hacia las personas afroamericanas, apareciendo en un video junto a un grupo de importantes jugadores de color de la NFL dando un mensaje de impacto al respecto, además que dentro de lo deportivo ya se las ingenió para ser el primer jugador en la historia de la liga en ganar el trofeo de jugador más valioso de la temporada y ganador del Super Bowl antes de cumplir siquiera los 25 años. Mahomes ostenta ya en su joven carrera 10 records históricos dentro de la liga, por lo que el mercado y todos los interesados en la liga llevaban tiempo expectantes de lo que serían las negociaciones para la renovación de su contrato, especialmente por las consecuencias financieras que traería para futuras renovaciones y extensiones de contratos en la liga.

El día de ayer, los Jefes de Kansas City anunciaron la extensión de contrato para Patrick Mahomes, en la cual acordaron añadir 10 años más a los 2 restantes que tenía en su contrato, por la impresionante cantidad de 503 millones de dólares, de los cuales 477 millones son garantizados, asegurando la estadía de Mahomes en Kansas City por los próximos 12 años. Este contrato, no solo se convirtió en el más grande de la historia de la NFL, si no también de la historia del deporte estadounidense, y muy probablemente del deporte mundial.

Dentro de los efectos inmediatos que rodean esta noticia, de entrada, el mercado de los quarterbacks se reseteó por completo, jugadores cercanos a renovar o que ya están en pláticas de renovación podrán demandar mayores sueldos anuales, y mayor dinero garantizado dentro de sus contratos. Un ejemplo importante es el quarterback de los Vaqueros de Dallas, Dak Prescott, quien en meses anteriores sostuvo fuertes negociaciones con su equipo, pidiendo casi 45 millones de dólares anuales, y no llegaron a ningún lado, por lo que acabará jugando esta temporada con la etiqueta de jugador franquicia a espera de poder concretar un nuevo contrato pronto, sin duda, esta firma de Mahomes le beneficiará para lograr un acuerdo más cercano a sus pretensiones económicas que a las que ofrecían los Vaqueros.

Deportivamente, para Kansas City, lograr atar por prácticamente toda su carrera al mejor jugador de la NFL, que está apenas por cumplir los 25 años, con toda su etapa máximo rendimiento por delante, y rodeado de un plantel joven pero plagado de talento en la mayoría de las posiciones, pone a los dirigidos por Andy Reid en una posición privilegiada para buscar ser la siguiente dinastía en la NFL, y, ¿Por qué no? apuntar a pasar los logros obtenidos por los Patriotas de Bill Belichick y Tom Brady, que juntos llegaron a jugar 9 Super Bowls, ganado 6 de ellos.

Dentro de los obstáculos que se le presentarán a Patrick Mahomes y a los Jefes en su lucha por conseguir el trofeo Vince Lombardi en estos siguientes 12 años, el mayor de ellos no será dentro de la cancha, sino en las oficinas. Con información brindada por el periodista norteamericano Grant Cohn de Sports Illustrated, se ha revelado que ningún quarterback que represente más del 13% del tope salarial del equipo ha logrado ganar el Super Bowl, los más cercanos han sido Steve Young y Tom Brady quienes lograron hacerlo abarcando el 12% del tope salarial.

Basado en los aumentos que ha tenido el tope salarial durante los años, las proyecciones arrojan que los porcentajes que abarcará Patrick Mahomes en el equipo de la temporada 2020 a la 2024 serán los siguientes: 2.4%, 11.5%, 13.8%, 17.6%, y 15.6% respectivamente, dejando únicamente las temporadas 2020 y 2021 como viables para ganar Super Bowl siguiendo el patrón de campeones que se ha presentado en la historia, por lo que la gerencia de los Jefes tendrá la títanica labor de ingeniárselas para lograr armarle equipos competitivos con menor espacio de salarios disponible.

Afortunadamente para Kansas City, si algo nos ha enseñado Mahomes durante su estadía en la NFL, es que está hecho para romper todas las maldiciones, records, y paradigmas que se le presenten en el camino dentro del emparrillado y fuera de él. Estamos ante un fuera de serie, un talento generacional, con potencial para ser el mejor jugador de todos los tiempos, felicidades a la afición de los Jefes por su renovación. A los demás, nos quedará sufrirlo cuando juegue contra nuestros equipos, pero definitivamente disfrutarlo cada que juegue contra todos los demás, porque el tipo es un auténtico espectáculo cada jugada que está dentro de la cancha.