Factor entre dos
Por: José Efraín caballero Sevilla
Se ha venido denunciando, que pese a ser una de las tareas más importantes de la llamada 4T el combate a la corrupción, existen en diversas áreas del gobierno federal funcionarios que siguen defraudando a quienes les han encomendado la administración de los recursos y la transparencia en los trámites en diversas dependencias.
Un ejemplo como señalábamos en una columna anterior, de una situación que es ampliamente difundida por su impacto mediático, fue la falta de capacidad exhibida de la dirigente Ana Gabriela Guevara, de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade).
El gran fracaso que vendría ya había sido advertido por diversos analistas. La delegación olímpica mexicana en Tokio, presentó resultados muy por debajo del compromiso asumido por Ana Gabriela Guevara de obtener 10 medallas, logrando al final solo 4 bronces, menos de la mitad de las preseas prometidas al pueblo mexicano.
Este es el resultado de malos manejos en la dependencia federal, denunciados por atletas que fueron relegados como Paola Espinosa y Melany Hernández quienes obtuvieron el tercer lugar en clavados sincronizados en el Mundial de Natación de la FINA, disputado en 2019.
Por trabas burocráticas como reglamentos internos, quedó fuera la dos veces medallista olímpica Paola Espinoza, siendo que el resultado obtenido del 2019 era meritorio según el reglamento internacional para asistir a la justa.
Deportistas apoyados con los reflectores de la prensa al ser figuras públicas, han sido ninguneados al denunciar las arbitrariedades de funcionarios federales como es el caso de Paola Espinoza ante Ana Gabriela Guevara, que nos dan una idea del porqué otros funcionarios siguen activamente ante casos de corrupción expuestos.
En nuestra entidad, se han venido denunciando mediáticamente casos de corrupción de funcionarios en los manejos de los dineros del IMSS y del ISSSTE, y nadie hace nada para corregirlo.
Apenas este lunes el Dr. Javier Mendoza Banda, Jefe de Prestaciones Médicas del IMSS en Tamaulipas, fue denunciado por corrupción en la compra de medicamentos de la institución, ante la FGR, por un medico que presentó la denuncia y este fue corrido de su puesto de trabajo.
Nos preguntamos donde está la denuncia al respecto del Senador Américo Villarreal Anaya, que prefiere pasearse por las plazoletas públicas buscando ser el siguiente Gobernador de Tamaulipas, y no levantar la voz para acabar con la corrupción que afecta los servicios médicos de sus conciudadanos tamaulipecos.
Por esta situación grave, la Federación de Cámaras de Comercio de Tamaulipas (FECANACO) demandó la separación del cargo de la delegada del IMSS, Velia Patricia Silva Delfín, ante su inoperancia y falta de capacidad en el cargo.
Ante esta problemática que atañe a los ciudadanos de la entidad surge la pregunta una vez mas: ¿Por qué tiene que ser un medico el denunciante, y una organización civil quienes vean por los tamaulipecos, y no el máximo representante del pueblo tamaulipeco ante uno de los poderes federales, que es el Senador Américo Villarreal Anaya?
Los ciudadanos han tenido que salir a defenderse por si solos, ante la ausencia de su representante, quien debería ser el encargado de presentar estas denuncias al tener esa posición destacada.
Alejandro Rojas Díaz Duran a levantado denuncias en diversas oportunidades, así como la Senadora Lupita Covarrubias, pero el Senador Américo brilla por su ausencia, por lo que difícilmente levantará la voz para arreglar de una vez este problema enraizado, ya que en sus prioridades no está el servir a los ciudadanos, si no el servirse de ellos otros 6 años más.
Querido lector, le deseo un excelente día.
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