FACTOR ENTRE DOS
Por: José Efraín Caballero Sevilla
Lamentable, la opacidad con que presuntamente se están manejando recursos en la Secretaría de Bienestar (SEBIEN), en donde los apoyos de los programas sociales están llegando incompletos, denuncian algunos beneficiarios de becas para estudiantes, donde solo se les ha otorgado un 50 por ciento del compromiso, y en otros casos no les llega nada del recurso.
Según diversos testimonios, que inclusive se pueden corroborar en la página de Facebook de la citada dependencia, se menciona de parte de algunos ciudadanos, que pese a tener autorización de pago, este no se ha realizado desde hace más de un año, situación que también han padecido quienes participan en créditos a la palabra, o solicitaron apoyo por contar con capacidades diferentes.
Es fuera de toda lógica el impago del recurso, ya que este se encuentra autorizado en el presupuesto de egresos, y el cálculo de los beneficiarios corresponde al recurso asignado.
Por tal motivo, no existe justificación para el incumplimiento, y la pregunta es ¿a dónde se está yendo ese dinero, que no es otorgado a los beneficiarios, y que ya está registrado como egresos en el presupuesto autorizado?
Son diversos funcionarios públicos federales, que no han correspondido al trabajo para el cual fueron contratados por la 4T, y han mostrado una gran ineptitud e ineficiencia, y no van al ritmo de trabajo que demanda el Presidente de la Republica Andrés Manuel López Obrador; que no solo tiene que luchar contra las inercias del pasado, sino contra las inercias del presente, de quienes les está quedando grande el compromiso y no pueden cumplir con su encomienda.
Si esa ineptitud se da en los altos funcionarios, para muestra un botón, ya que, consultando a un siervo de la nación, de apellido López Hernández, este comentó que pese a estar autorizada la orden de pago, estaban retrasados en los pagos ya que se seguía revisando la documentación, para ver si no había falla en los datos, pese a existir esa “orden de pago”.
Si la información que proporcionó es errónea, hablamos de falta de capacitación y preparación del personal que está asignado para informar a la ciudadanía, pero de ser cierta sería irregular al estar ya asignado una referencia bancaria.
En la información oficial correspondiente, se menciona que se en créditos a la palabra se cuenta con un periodo de 90 días para hacer el retiro después de haberse realizado la orden de pago, pero en múltiples ocasiones se superan los 90 días y no se llegó a realizar el depósito para su retiro, por lo que carece de fondos y de manera oficial quedaría fuera del apoyo.
Este programa tiene la finalidad de reactivar la economía, pero con la gran demora burocrática no se está traduciendo en oportunidad para los ciudadanos, que ya manifiestan su frustración y abandono de las autoridades correspondientes.
Esto que le comento, no sale en las conferencias mañaneras, donde el Secretario de Bienestar Javier May Rodríguez, con bombo y platillo informa del “alegre” número de beneficiados, al aprobarles su orden de pago, pero no dice que muchos no tienen fondos o son entregados parcialmente, como denuncian muchos de los beneficiarios.
Por otro lado, es innegable la buena voluntad del Presidente de la Republica, de apoyar a las familias, pero también es innegable la falta de capacidad y compromiso, de políticos y funcionarios arribistas, que solo buscan “un hueso” y están ocupando un espacio, que correspondería a ciudadanos con mayor capacidad.
En Tamaulipas, es una situación que se replica, y mientras tanto, no hay quien de respuesta y auxilio a quienes no han recibido los apoyos, y que el recurso simplemente se esfumo sin entregarles su financiamiento autorizado previamente.
Se dice en la opinión pública, que el peor enemigo de la 4T, no son los partidos de oposición, si no que están dentro de la 4T. Ya hemos visto el show mediático donde llovieron señalamientos de corrupción entre unos y otros, de quienes pretendían presidir a Morena.
Igualmente, funcionarios que han renunciado a su cargo, mientras estuvieron al frente de las instituciones, eran considerados eficientes, pero tras su renuncia es cuando se hace una investigación de su desempeño, presentando malas cuentas.
¿Cuántos funcionarios deben de renunciar para que se ponga en tela de juicio su desempeño? Porqué mejor no revisar su trabajo al frente de las instituciones, y darle una revocación de mandato por su incompetencia, en caso de ameritarlo; como se pretende con los funcionarios llegados por voto democrático.
Querido lector, tenga un excelente día nos leemos la próxima.
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