“Tenemos que hablar”
Por: Candelaria Bacque
Decís amarme, pero no me cuidas. A mí que te conozco desde tus comienzos. Que estoy acá desde hace tanto tiempo. Yo que vi tus alas abrirse a la vida y volar sobre mí. Te di lo más puro que tenía, te di sin limites mi inmensidad. Te invité a sumergirte, limpiarte, sacudirte, refrescarte. Te invité a flotarme.
Decís amarme, pero te enfurecen mis defectos. Si me veo oscuro, si me encuentro inquieto. Si no soy tan sólo mi mejor versión.
Decís amarme, pero vas por ahí sin medir consecuencias que puedan dañarme.
Y te gusta mi voz, pero escuchas tu música. Y te encanta mi fuerza, pero también te asusta. Me queres transparente, luego vas y me ensucias.
No soy turbio sin vos, que decís por ahí que te mata mi ausencia. Pero, debo decir, que en el plástico las palabras pierden coherencia.
Soy un viejo salvaje, que me calmo y me enojo. Solo espero que un día no te toque extrañarme. Y perdón mi descargo, pero encuentro muy rara tu manera de amarme.