Tlamatinime
Decálogo para los políticos
Por: Eusebio Ruiz Ruiz.
Llegó a mis manos un escrito titulado: “Decálogo para los políticos y sus representados”, elaborado por Francisco López Rivera, S.J., el texto está dirigido a los hombres y mujeres practicantes de la política y a todos los conciudadanos, es la parte final de una conferencia en la que se habló de las relaciones entre la política y la ética.
- Contribuir entre todos a la creación de una nueva cultura política fundada en la ética.
- Asumir, como representados, la propia responsabilidad en el tránsito del país a la democracia y a una mayor justicia.
- “No apostar al fracaso, pues eso engendraría un derrotismo y una desesperanza que sería muy difícil de superar en el futuro” (Episcopado Mexicano).
- No permitir que las ideologías estorben en el tránsito del país a la democracia.
- Pensar bien con qué criterio y en favor de quién se hacen las leyes. El criterio debe ser: el bien común, el bien del país (esto vale para los legisladores). Esto en favor de todos los ciudadanos, especialmente de los más necesitados.
- Respetar la primacía de la persona humana, por encima de las conveniencias políticas.
- Basar la política en programas bien pensados y creíbles, y no simplemente en el enfrentamiento verbal.
- Insistir en lo propositivo, en lo constructivo, más allá del simple golpeteó mutuo.
- Abandonar la política-espectáculo y el afán de aparecer en los medios de comunicación.
- Abandonar la lógica de la conflictividad, en la cual se niega el diálogo y se considera adversario absoluto a quien no piensa como uno. Se considera que una parte tiene toda la razón y la otra está totalmente en el error. No olvidar que “en todo auténtico diálogo, ambas partes aceptan de antemano salir modificadas” (Ecclesiam suam).
Debemos mantener viva la ilusión de que el caminar de la política se enderece, esa es la razón por la que transcribí estos diez puntos, lo hago con la esperanza de que “caigan en tierra fértil” y rindan los frutos que nuestro País necesita.