Por Nacho Losilla
Uno de los duelos más interesantes de la actual NBA llega este jueves. El plan radical de Houston, de sobresalientes resultados hasta ahora, y la infinidad de recursos de los Clippers, frente a frente.
Cuando los Houston Rockets potenciaron y llevaron al extremo su idea de juego, con el traspaso de Clint Capela, miles de dudas sacudieron la NBA. Unas semanas después y tras los primeros resultados, parece que la idea funciona, aunque el momento de comprobarlo será en los Playoffs.
Precisamente ahí, en la postemporada, puede darse un enfrentamiento con Los Angeles Clippers. El equipo de Doc Rivers y el de Mike D’Antoni son los dos bloques candidatos que o bien no tienen pívot -Houston- o no disponen de una figura de siete pies con experiencia o grado de estrella -Clippers-.
En la noche del jueves se verán las caras en el Toyota Center de Texas. Duelo para analizar y estar atentos.
Desde el traspaso de Capela, los Rockets han disputado 10 partidos y su récord es de 7-3. Victorias potentes y alguna derrota decepcionante, como la sufrida en su tercer encuentro ante los Suns. Sin embargo, los registros y las sensaciones ofrecen resultados muy positivos.
En este tramo, Houston tiene el 5º mejor ataque y la 10º mejor defensa de la NBA. Es uno de los dos equipos que se sitúa en el top 10 de ambas categorías, precisamente el otro son los Clippers. Y es que, en estas semanas, son los dos equipos más en forma del Salvaje Oeste.
La nueva formación de D’Antoni cuenta con 8 jugadores principales que alcanzan como máximo los 2,03 metros. Russell Westbrook, James Harden, Eric Gordon, Robert Covington y PJ Tucker, con Danuel House, Austin Rivers y Ben McLemore desde el banquillo, en función de las lesiones. Jeff Green y DeMarre Carroll completan el fondo de armario.
Cinco jugadores abiertos que permiten un espacio como jamás han visto Harden y Westbrook. El segundo muestra la mejor versión de toda su carrera. Acertado en el tiro, penetrando más que nunca y con lecturas acertadas. Desde que Houston pasó al micro-ball promedia 22,1 penetraciones por partido, máximo de la liga, y se marcha a 33,6 puntos, 7,6 rebotes y 5,5 asistencias, con un 56,3% en tiro y un 42,1% en triples.
Covington está siendo todo lo que esperaban a nivel de impacto, aunque todavía puede ofrecer mejores porcentajes desde el exterior (36%). Sus largos brazos le sirven a los Rockets para que RoCo sea el falso interior del equipo. Se encarga de cubrir a los interiores más destacados y utiliza la envergadura para cortar líneas de pase por delante, mientras Tucker batalla y realizan un sinfín de ayudas.
El alero ex de Minnesota siente la importancia que tiene en el plan del equipo. Relanzan su nivel a través de su incorporación, lo que aumenta su confianza. El 77,9% de sus tiros llegan desde el triple, pero lo hace encantado. A tal punto llega la seguridad moral de Houston en estos momentos, que el nuevo plan muestra su versión más colectiva. Todo ese movimiento de balón que pedía Chris Paul la pasada temporada se da ahora con Westbrook y sin Capela.
Las alternativas de los Clippers
Si hay algún equipo perfectamente construido para hacer plan al radical plan de Houston, son precisamente los Clippers. Utilizan a Ivica Zubac de titular, un siete pies cuyo progreso es notorio, pero joven y sin experiencia en Playoffs. Un valor a medio plazo muy interesante, aunque su utilidad a corto plazo está por demostrar.
Rivers dispone de diversas alternativas. En la victoria contra Oklahoma City Thunder el pasado 3 de marzo, el entrenador puso a Zubac de inicio en el partido y después varió: fue JaMychal Green el que comenzó la segunda parte. Ahí precisamente están las dos opciones de los Clippers de usar diferentes pivotes de inicio.
Sabemos lo que Zubac ofrece. Tamaño, bloqueos, recursos de espaldas a la canasta y una protección de aro más tradicional. Green es un cinco moderno que, pese a no alcanzar los 2,05 metros, es muy duro y tiene una buena mano (36%). Mientras Zubac bloquea y continúa, Green pone la pantalla y se abre.
Rivers querrá conservar a Montrezl Harrell en el banco. El joven pivote y su unión con Lou Williams -ahora con el estímulo de Reggie Jackson- hace que los angelinos tengan el mejor banco anotador de la competición. ¿Cómo puede funcionar Harrell? Es móvil y prácticamente todos sus puntos llegan en la pintura, por lo que puede arrasar en tramos cortos desde el banco.
Y Doc guarda un as bajo su manga: replicar el micro-ball de los Rockets. En Paul George, Kawhi Leonard y Marcus Morris, los Clippers tienen al mejor trío de aleros en ambos lados de la cancha de toda la liga. Sin discusión. Los tres están en el 2,03 y Mook puede hacer de falso pivote contra Houston, porque tiene más tamaño y un carácter extra que viene muy bien al lado de dos jugadores de otra mesura.
La consistencia en el tiro exterior y el agujero reboteador son las dos grandes lagunas de los Rockets. Dos puntos donde los Clippers pueden hacer mucho daño, incluso con alineaciones pequeñas. Disponen de una nómina extraordinaria de tiradores y no viven y mueren en el perímetro, como pasa con Houston.
Imaginen un Beverley, Lou-Will, George, Leonard y Morris compitiendo con Westbrook, Harden, Gordon, Covington y Tucker. Small-ball llevado al extremo, en los dos casos. Es un partido perfecto para fijarse en cómo planteará Rivers su estilo contra el plan de Houston. Eso sí, bien puede guardarse algún recurso y no enseñar todo hasta el momento decisivo. Un posible cruce. Ese es su enfoque durante todo el curso.