Por: Ricardo Gaviño Cárdenas
Estamos a punto de entrar en la segunda etapa del año del 2020. Un año que ha estado envuelto de muchas sorpresas, no del todo positivas. En el caso de Tamaulipas no es la excepción y en su capital, Ciudad Victoria aún peor.
En medio de la lamentable situación que estamos pasando por la pandemia del COVID-19, existe un tema igual de importante que sigue complicándose para los victorenses, la escasez de agua sigue reinando desde hace más de dos años y no hay autoridad responsable que dé la cara y actúe para solucionar este vergonzoso problema.
La Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA) es el organismo descentralizado encargado de suministrar el agua potable, mantenimiento, reparación, tratamiento de aguas residuales, instalación de medidores, entre otras responsabilidades más. Y está constituido por un Consejo de Administración en el que es presidido por el alcalde.
En el caso de Victoria, hace un par de año le tocó la “papa caliente” al talentosisímo alcalde Xicoténcatl González, en el que recibe una institución quebrada y con graves problemas de infraestructura.
La situación hoy es la siguiente: la tubería de la ciudad es vieja y obsoleta, se fuga entre el 50% y el 60% del agua (según los comunicados de la propia COMAPA), los sectores “afortunados” tienen aguas por periodos de tiempos, a menos que tengan cisterna y bomba de agua personal, el municipio no cuenta con el presupuesto para arreglar la problemática, el gobierno local trata de abastecer a la población con pipas, acaban de aumentar la tarifa y aún así, no existe una solución puntual a la crisis que se vive.
Esto me da a concluir tres importantes puntos. Bueno, el primero no es importante porque sabemos de la incapacidad del alcalde por arreglar los problemas. El segundo, ¿acaso no hay diputados locales que aboguen por los ciudadanos? Porque hasta donde tengo memoria, hace un año andaban en campaña prometiendo y no se les ha visto tratando de solucionar la crisis. Y por último, ¿en dónde está el gobierno del estatal? Ya que tanto el alcalde y los diputados (electos) son panistas.
Esto es un problema meramente de recurso y, por supuesto, de ganas. Así como trabajar en los temas de salud, el abastecimiento de agua potable es una responsabilidad básica de cualquier gobernante.
Hoy por hoy no hay congruencia. Hace semanas se inició una campaña en el que decían que Tamaulipas es uno de los estados más importantes del país. Y de verdad que no entiendo que la capital de uno de los estados más importantes no pueda gozar de este servicio esencial.
De lo único que estoy seguro, es que en términos electorales en Victoria, no habrá encuesta que verdaderamente revele la molestia de la falta de compromiso.