*En el país la ciudadanía no decide quien gobierna, sino los partidos
Por Luis Repper Jaramillo*
¿Más partidos políticos hacen mejor democracia?, desde luego no… menos en México.
El considerado país más democrático del mundo, Estados Unidos, sólo tiene dos partidos: republicano y el demócrata, el Estado (ciudadanía) no financia las actividades de éstos y menos patrocina las elecciones. Allá se permite que los particulares, empresarios, iniciativa privada cooperen con cada candidato al desarrollo su campaña.
El Tío Sam ha tenido alternancias en la Casa Blanca. Algunos mandatarios que se corrompieron, fueron expuestos y destituidos, como el caso Richard Nixon, que exigieron el Congreso, los votantes y el influyente Diario Washington Post, conocido como el Caso Watergate.
¿En México ha sucedió algo igual?… ¡claro que no! A pesar de pruebas, exhibiciones y documentados, ningún mandatario ha caído. Unos a otros “se tapan” por el clima de corrupción e impunidad imperante.
Es evidente que los partidos políticos son un club de amigos (o negocio familiar) que sólo buscan conservar privilegios (prerrogativas -$- cargos públicos, poder), además preservar corrupción, colusión, tráfico de influencias, encubrimiento, enriquecimiento muy explicable, impunidad, valemadrismo.
Así ha sucedido a lo largo de la incipiente vida “democrática” en México, que no termina de cuajar, porque los partidos políticos lo impiden… como dice el clásico, no se darían un balazo en el pie. No son tontos, sólo corruptos.
En aras de interpretar “su” democracia estos grupos medran con la inteligencia, dinero y credulidad de los mexicanos, que a manos llenas les hemos dado dinero en multimillonarias prerrogativas a través de la CFE, IFE e INE, dinero digno, limpio, que en manos de políticos, partidos y autoridades electorales prostituyen, usufructuando esos recursos con fines personales, políticos, grupales, familiares, etc.
Les hemos dado la oportunidad de crear y consolidar una democracia representativa, pero su corrupción, soberbia y desinterés mantienen tiranía partidista (PRI 76 años, PAN 12 años, Morena en sus raíces PRD, lleva 22 años en el GCDMX), con una incipiente alternancia, que no garantiza mejor calidad de vida para más de 126 millones de mexicanos, pero sí para la corrupta clase política y gobernante, pese a haber sido electos por los crédulos votantes.
Insisto, más partidos políticos no significa mejor democracia. Hemos sido engañados permanentemente por éstos. Decía líneas arriba que son club de amigos (PRI, PAN, PRD) y negocios familiares. Me remonto a los segundos: Partido Demócrata Mexicano (PDM), propiedad de Gumersindo Magaña Negrete y consanguíneos. Desapareció en 1988 cuando perdió su registro en la elección presidencial por no lograr el 2 por ciento de votos del Padrón de Votante. Pero las prerrogativas que en ese entonces le dio la Comisión Federal Electoral (CFE) regenteada por la Secretaría de Gobernación, las utilizó para comprar autos, casas, ajuar para su esposa y seis hijos, etc. Un negocio redondo familiar.
Partido de la Sociedad Nacionalista (PSN) propiedad de Gustavo Riojas y familia, quienes se dieron lujos, viajes, bienes, inversiones (con dinero de prerrogativas) en dólares en Estados Unidos. Los “empleados” de los Riojas, denunciaron anónimamente ante la CFE que sus patrones se daban vida de reyes, al grado de calificarlos como “familia real”. El último tesoro obtenido fueron 451 millones de pesos en el año 2000 como financiamiento público. Ante tanta corrupción en 2003 desapareció, sin devolver un peso al erario público.
Partido Verde Ecologista de México (PVEM), el más arribista que ha tenido la historia política del país. En su inicio fue propiedad de Jorge González Torres (Dr. Simi), que heredó a su hermano, luego a su hijo Jorge Emilio González Martínez (Niño Verde) varias veces diputado federal, Senador, boxeador, etc. inmiscuido en un asesinato. Lo fundó el farmacéutico en 1986, gozando desde entones de millonarios beneficios político/electorales, que por sí solo nunca ha ganado nada. No pierde su registro porque se alía con PRI, PAN, conservando su registro. Es una vergüenza este partido de la familia González.
Partido del Centro Democrático (PCD), sino familiar, sí, por afinidad. Lo fundaron el ex priista Manuel Camacho Solís y su brazo derecho, operador político y secretario general, en 1999, Marcelo Ebrard Cassaubón, Tuvo efímera existencia –sólo 2 años- Participó en la elección presidencial del año 2000, no obtuvo los votos suficientes y perdió su registro ese mismo año, no sin antes recibir millonarias prerrogativas. El dinero se esfumó.
Partido Nueva Alianza (PANAL) propiedad de la dictadora, corrupta, impune lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) Elba Esther Gordillo Morales, de negrísimo historial, que a la cárcel fue a dar.
Fundó su juguetito familiar en 2005, cuando se peleó con sus amiguísimos de toda la vida el PRI. Apoyada en las cuotas sindicales de los maestros, quiso demostrar a su ex partido todo el poder, dinero e influencias que dejaban ir. Para ello, utilizó a su familia para asegurar durante 13 años prerrogativas (dinero limpio), que es lo suyo ($$$) para comprar mansiones en Estados Unidos, Polanco, obras de arte, yate, avión, ajuares de marca (vestidos, bolsos, zapatos, abrigos, joyas, restiradas, etc.) dándose vida de reina con dinero de las cuotas sindicales y el financiamiento electoral.
La venganza del PRI la cobró Enrique Peña Nieto, quien ordenó la detención de Gordillo Morales, por lavado de dinero, asociación delictuosa, que la llevaron a la cárcel durante 5 años, decomisándole también bienes, obras de arte propiedad del SNTE, que tenía en su pent-house de Polanco y residencia en Coronado, San Diego, Estados Unidos.
Pero el negocio familiar de la chiapaneca no se detuvo. Luego de renunciar al matriarcado del Panal y tras purgar sentencia en prisión, volvió por sus fueros. Mientras estaba detenida, su nieto René Fujiwara y el esposo de su hija Mónica Arreola (fallecida) Fernando González Sánchez, jugaron las contras al PRI, PAN, PRD, apoyando al candidato presidencial de Morena, Andrés Manuel López Obrador, con una maquiavélica jugada: aliarse con El Peje, para obtener la liberación de la abuela/suegra e ir por más.
Financiados por Elba Esther, su parentela formuló ampliar el negocio que sabe hacer: oootro partido político, con el aval de López Obrador. Diseñaron, presentaron y operaron el mamotreto que les dejará muuucho dinero limpio a prostituir, Redes Sociales Progresistas (RSP) que obtuvo el visto bueno del INE y en julio de 2020 resolverá convertirlo en Partido Nacional, dándole de entrada para sus actividades partidarias y electoreras 41 millones 573 mil pesos en prerrogativas, (en año no electoral) sólo para los últimos 5 meses de 2020. En 2021 recibiría más dinero.
El dirigente nacional de RSP, reconocido por el INE, es el yerno de la Maestra, Fernando González Sánchez. El nieto, Fujiwara, formará parte del cuadro directivo, quien cuidará los dineros de la abuela y seguro en 2021 lo postulará para diputado.
Bien. En México los políticos son una boñiga. Resulta que la convocatoria del INE para aumentar de 7 a 11 partidos políticos para la elección intermedia de 2021, que cambiara la Cámara de Diputados, algunas gubernaturas y congresos locales, está a punto de cerrar y ya se apuntaron varios grupúsculos para comer rebanadas de pastel del presupuesto electoral.
Una mentada de madre lo que va a leer: hicieron acto de presencia unas cosas que se llaman… ahí le van: Encuentro Solidario (ES) nacido de la escisión del Partido Encuentro Social (PES) que perdió su registro, regenteado por un tal Hugo Erick Flores, quien fuera dirigente del PES. Un contrasentido moral.
Grupo Social Promotor de México (GSPM) ¿qué es eso? Surgido de lo que fue el PANAL (de Elba Esther), cuyo impulsor y cabeza visible es Alfonso Zepeda, ¿qué creen? ¡¡Es el dirigente nacional del SNTE!!… ¿le dice algo esto?… Wooow.
México Libre, atinó el juguetito de Margarita Zavala y Felipe Calderón, ¡increíble!, pero Andrés Manuel ya se encargó de aplastarlo. No logrará registro. Sacó dos temas candentes contra los Calderón/Zavala, el fraude por la Estela de Luz, ya investigado y casi concluido por la UIF de la SHCP. El segundo, la captura en Texas, del brazo ejecutor del ex presidente Calderón Hinojosa, Genaro García Luna, ya en juicio en Nueva York por actos ilegales en favor del narcotráfico y falsedad en declaración ante autoridad judicial en la unión americana. De estas no se levantan Margarita y Felipe.
Fundación Alternativa (FA), sepa qué choro es este. Su impulsor y dirigente es el ex priista César Augusto Santiago, quien renunciara al partido después de 50 años de militancia, en rechazo a la dictadura que Enrique Peña Nieto ejercía en el tricolor (no lo dejó llegar a la dirigencia de los dinosaurios) y acusó que a ese partido no le interesa la gente y sólo es ocurrente. Lo conoce muy bien, por eso corrió de él.
En el Estado de México se fragua la creación del Partido Fuerza Social (PFS) una agrupación chaquetera que durante decenas de años fue priista, pero con la llegada de López Obrador a Palacio Nacional, suciamente abandonan a quien les dio poder y riqueza. Cambian de color, ahora son guindas.
Es dirigido por el vetusto, dictadorzuelo, sempiterno líder de la CTM mexiquense Armando Neyra, ya decadente y anciano. Para asegurar su futuro económico creó la Confederación de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) que controla todos los sindicatos de la entidad.
Como ya está “cansado”, hizo lo que todo líder corrupto hace, heredar ambas centrales a su hijo Jorge Neyra Sosa, quien regentea PFS. Cómo brazo derecho y operador político impuso a su primo Reinol Neyra González ¡¡qué bonita familia, qué bonita familia!!
Dejo al final MORENA, que ya está en el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Un negocio redondo de la familia López Obrador. Dio ejemplo para que otros grupúsculos lo imitaran; a éste le salió, seguro los demás no tendrán la misma suerte.
Luego de este escenario, ¿sigue creyendo que en México existe la democracia representativa?
Ya lo dijo el ensayista y poeta mexicano Alberto Ruy Sánchez “México está atrapado en un sistema corporativista coludidos partidos y sindicatos. La democracia es boicoteada por la corrupción e impunidad que alcanza el 98% de infiltración del narcotráfico en la vida de los partidos”
*Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT) y de Latitud Megalópolis (LM)