Del Abogado Amigo
Luis Torre Aliyán
2021, “Medirle el agua a los camotes”
Al presidente de México le gusta hacer “consultas” a la sociedad, pero las hace a su antojo: donde él quiere, con quienes él quiere, en el auditorio donde él decide y, más importante, con sus criterios y sus reglas.
Lo mismo sobre el aeropuerto de Texcoco que sobre la política pública de la relación exterior con Estados Unidos.
Pero, “para medirle el agua a los camotes” como él dice, qué tal salir en la boleta electoral en 2021… Qué barbaridad.
Una persona que tanto se quejó de la democracia antes de estar en el poder, ahora con éste en sus manos pretende iniciar su destrucción, bajo el pretexto de la revocación de mandato. Me explico:
Imaginen que cualquier gobernador de la república apareciera en la boleta, en su Estado, en 2021, para que continúe o bien para dejar el cargo. Más allá de cómo le iría, sin duda procuraría ganar a costa de lo que sea; vaya, haría -todo- lo posible por él salir adelante y en consecuencia le iría bien también a los candidatos del partido de ese gobernador.
Esto es jurídicamente imposible que pase, pero a lo que voy, y lo digo coloquialmente: El solo hecho de que un gobernante en turno aparezca en la boleta es una mentada de madre para el resto de competidores.
Perdón por el francés, empero, es lo que es: enormes desventajas resultarían para el resto de partidos políticos en relación con MORENA en todo el país si el presidente apareciere en la boleta electoral el mismo día que el resto de las elecciones para elegir representantes populares de los tres niveles de gobierno.
Y es que es evidente que de darse el caso, el gobierno federal echaría a andar una maquinaria sin precedente (en serio eh, ni en las peores épocas del PRI…) en función de que al presidente le vaya bien ese día, lo que naturalmente desequilibraría en gran medida la contienda electoral, pues eso arrastraría una inmensa cantidad de votos a su partido.
¿Quién le va a ganar en las urnas a un presidente de la república, que además regala dinero? Por Dios. Y menos con el brutal subdesarrollo que tenemos y que a él parece interesarle se agudice: Ya desapareció el Fondo Minero; ya desapareció el INADEM; ya desapareció el Consejo de Promoción Turística; los Pueblos Mágicos; ya desapareció Prospera, Estancias Infantiles, y podría seguirle… A ese ritmo, derrumbando instituciones, no sorprendería que se concrete lo que incluso ya se escucha, el debilitamiento estratégico del Instituto Nacional Electoral.
Ojalá, de verdad, que no pase la revocación de mandato en el Senado en los términos de la iniciativa del presidente, no veo como exista una verdadera democracia en un país donde el presidente en turno aparece en la boleta. Aquí pasa como con la justicia, no se puede ser juez y parte, y cuando ese binomio se da, no hay justicia.
Si se diera el ejercicio de la revocación de mandato como caprichosamente lo plantea el presidente López Obrador, considero que veríamos también, el inicio de la sepultura de nuestra de por sí imperfecta democracia.
Creo que con su idea y términos de la figura, de darse en 2021, los que “no le hemos medido bien el agua a los camotes” somos todos los mexicanos. Debemos de apoyar a la oposición del Ejecutivo en el Senado de la República con ese tema, por la supervivencia de nuestra democracia.