El ejercicio físico no solo es beneficioso para mantener tu cuerpo estilizado, sino que además es muy bueno para tu salud mental.
¿Quieres saber cómo? No dejes de leer lo que sigue.
¿Cómo actúa el ejercicio sobre el cerebro?
El ejercicio estimula al cerebro para trabajar a su máxima capacidad, en tanto hace que las células nerviosas se multipliquen y fortalece a su vez sus interconexiones. Asimismo, favorece el nacimiento de nuevas neuronas.
Todos estos efectos son particularmente eficaces para prevenir el desarrollo del mal de Alzheimer y otras enfermedades mentales como la demencia senil y el mal de Parkinson.
¿De qué otras maneras influye el ejercicio en el cerebro?
Todos los estudios realizados hasta el momento indican que tanto el ayuno como el ejercicio activan genes que son capaces de robustecer los tejidos cerebrales y musculares.
Además, realizar una actividad física aumenta la frecuencia cardíaca, lo cual favorece la oxigenación del cerebro y colabora en la liberación de una gran cantidad de hormonas, todo lo que facilita el funcionamiento óptimo del sistema nervioso.
Consejos para escoger el ejercicio adecuado
Por lo general, todos los ejercicios que son buenos para el corazón, también lo son para el cerebro. Por lo tanto, una buena opción es la de realizar actividades aeróbicas tales como la zumba, el baile, el ciclismo, la natación e inclusive las caminatas o salir a correr. Todas estas actividades físicas benefician a las células cerebrales dañadas.
La mejor hora es por la mañana o durante el atardecer, pues en cualquiera de esos momentos te será posible disminuir las tensiones mentales para tener una jornada mucho más apacible y relajada.
Recuerda que, para mantener tu cerebro funcionando de la mejor manera, es necesario que también lleves una dieta balanceada que incluya muchos alimentos integrales y granos, y pocos azúcares.