Tlamatinime
Vientos esperanzadores
Por: Eusebio Ruiz Ruiz.
Los vientos de cambio y esperanzadores han llegado a Tamaulipas, el primer gobernador panista en la historia de nuestro Estado, los tamaulipecos esperamos que se hagan realidad los sueños de justicia y paz que todos tenemos.
Los cambios que esperamos no son actos de magia, son el resultado del trabajo y el esfuerzo conjunto de todos los tamaulipecos, de esto tenemos que ser conscientes, porque los rivales políticos del panismo estarán al acecho haciendo notar el punto negro en la hoja blanca y buscando la oportunidad para meter zancadillas.
Los 10 compromisos adquiridos por el nuevo gobernador manifiestan la buena voluntad de trabajar por nuestro Estado, en la medida que estos se vayan haciendo realidad, la confianza de la sociedad irá creciendo.
El trabajo del gobernador será la mejor respuesta de gratitud que podrá brindar a una sociedad que ha depositado en él su confianza, enorme es el compromiso que tiene con los tamaulipecos.
Más de 86 años duró el PRI gobernando Tamaulipas, no hizo lo correcto y pagó las consecuencias, lección que el gobierno actual debe tomar en cuenta para que trabaje con tenacidad y rectitud, sobre todo en lo que se refiere a la seguridad, que es el derecho en donde más hemos sido golpeados.
La humildad debe ser siempre una característica del gobierno de Francisco Javier Cabeza de Vaca, porque es el Pueblo de Tamaulipas quien ha brindado la oportunidad de servir a él y a todo su gabinete.
El compromiso de vivir esta virtud crece porque fueron muchos los panistas que a lo largo de los años prepararon el terreno para que un día el Partido Acción Nacional pudiera ocupar la gubernatura del Estado, algunos de ellos ya no pudieron ver la “tierra prometida” porque pasaron con el Creador, pero su trabajo ha rendido frutos.
Es fundamental en nuestro Gobernador y su gabinete el ser humildes, siempre deben tener presente que no tratan con los ciudadanos, sino con sus conciudadanos.
A los políticos en México se les conoce por su mediocridad, corrupción, privilegios, carencia de inteligencia, violaciones a la ley, abusos, imprudencia, escándalos, enfrentamientos y hasta por las “casas blancas”.
Los vientos de cambio deben soplar con fuerza para que quienes hoy están al frente del gobierno de Tamaulipas borren esta mala imagen del político y sean reconocidos por su trabajo honesto, sencillez, vocación de servicio, entrega, credibilidad, veracidad, conocedores de la realidad y fidelidad con los tamaulipecos.
Una nueva etapa política ha empezado a vivir Tamaulipas, sea bienvenida, tiempo en donde el ciudadano debe interesarse más por la política y en donde el político debe interesarse más por sus conciudadanos. Que los vientos esperanzadores del cambio, sean también refrescantes, porque se necesitan.
