Home Espectáculos Basura, reality de Kardashian

Basura, reality de Kardashian

0

Desde shows musicales hasta de sobrevivencia extrema, pasando por los de baile, canto, negocios, moda y hasta de comida, los realities son hoy un referente de la televisión.
“Carreras” como las de Kim Kardashian y su familia o la de Paris Hilton se han beneficiado por esta forma de hacer televisión que en unos cuantos años las ha vuelto millonarias y portadas de revistas.
Para el productor y protagonista del show de NatGeo Refugios extremos, Paul DiMeo, este tipo de entretenimiento se puede catalogar como “televisión basura”, pues en sus palabras está hecha “por productores hambrientos de dinero” y protagonizada por desconocidos sin talento que de la noche a la mañana adquieren notoriedad sin tener el talento de actuar, cantar o bailar.
“Creo que ese tipo de realities están acabando con la industria del entretenimiento, ahora los productores le apuestan por este tipo de televisión basura a la que con poco dinero deja grandes dividendos y eso ha provocado que shows con contenido y propuesta sean cancelados”, consideró DiMeo en entrevista.
Paul lamenta que actualmente la televisión atraviese por “un momento difícil” en el que en algunas productoras apuestan por hacer más realities sin contenido que apostar por show como el que el protagoniza y que, según explicó, busca crear consciencia en el televidente sobre la reutilización de los espacios para crear nuevas viviendas con recursos naturales y sin afectar a la flora y fauna del lugar.
“Cada día la televisión se inunda de programas basura que están acabando con la buena TV, aquella que apuesta por la ideas originales; la señorita Kardashian y su clan han contribuido a que todo empeore”, aseguró.
En Refugios extremos, Paulie se une a su socio Tuffy, un leñador totalmente distinto a él para realizar con construcciones ecológicamente “amigables” en algunas de las zonas más salvajes e indómitas de Estados Unidos.
Paul advierte que la competencia de programas como el realiza y se transmite en México a partir del pasado viernes por NatGeo, es desigual, ya que el presupuesto de un reality show es menor y a veces logra recaudar más.
“Hacer un reality como Big Brother o Survivor es económicamente más barato que un programa como el de nosotros; metes en una casa a desconocidos hambrientos de fama, no les pagas mucho y dejas que se despedacen, éxito asegurado, con nada de contenido y mucha basura incluida; es claro que eso le es más rentable a veces a los productores”, dijo Paul.
Los resultados
Reality shows como Keeping up With de Kardashians, que va en su décima temporada, es visto por cinco millones de televidentes semanalmente, número similar al que registran series como Once Upon a Time, que necesita de un presupuesto superior para recrear el mundo de cuento de hadas que presenta.
Big Brother, uno de los programas de este género más longevos, ha sido replicado en más de 50 países, incluido México, brindando cinco minutos de fama a más de tres mil desconocidos hasta ahora.