En el año 2014 el director James Gunn gracias a su adaptación de unos de los héroes más irrelevantes de Marvel, logro darles una muy buena primera impresión, convirtiéndolos en un éxito de buenas a primeras.
Hoy en día es innegable la popularidad de los héroes y aunque tanto actores como el director pasaron por dificultades para poder realizar la 3.ª entrega, está llego para darle un cierre a nuestros guardianes de la galaxia.
En GUARDIANES DE LA GALAXIA VOL. 3 de Marvel Studios, la querida banda de Guardianes se instala en Knowhere. Pero sus vidas no tardan en verse alteradas por los ecos del turbulento pasado de Rocket. Peter Quill, aún conmocionado por la pérdida de Gamora, debe reunir a su equipo en una peligrosa misión para salvar la vida de Rocket, una misión que, si no se completa con éxito, podría muy posiblemente conducir al final de los Guardianes tal y como los conocemos.
James Gunn cumple, a pesar de que podría ser predecible el final de algunos personajes, aprovecha la situación para darte algo completamente diferente. En cuanto a historia maneja un ritmo bastante campechano, a veces es muy acelerado y en otras muy lento, Gunn aprovecha y construye aún más a los personajes, pues se nota el esfuerzo por dejarlos en su punto más alto.
Guardianes de la Galaxia, por lo menos para mí, nos entrega un cierre perfecto dentro de lo imperfecto, es la excepción dentro de todas las películas recientes de Marvel, es una buena comida con la que quedas satisfecho después de comer y no solo la que comiste porque tenías hambre y ya.
Gunn transmite mensajes al mismo tiempo que cuenta su historia de una manera sutil, como tiene que ser, mostrando no explicando.
Disponible en salas de cine el 4 de Mayo.
