Tlamatinime
Amnistía
¿Sí o no?
Por: Eusebio Ruiz Ruiz.
Me gustaría decir que a todos los mexicanos nos interesa la paz social, pero no creo que sea así, se me hace más acertado decir que a la mayoría.
Si a la mayor parte de los mexicanos nos interesa y nos urge la paz en nuestro País, lo mínimo que podemos hacer es ver con atención las posibles soluciones a los graves problemas de violencia, inseguridad y del cómo hacer realidad que el derecho a la paz retorne a todos los rincones del territorio mexicano.
Antes de decir sí o no a la sugerencia de amnistía del candidato Andrés Manuel López Obrador, ésta debería ser expuesta con claridad, leída, estudiada, analizada y perfeccionada, el sólo negarse a verla e impedir que otros presten atención a su propuesta ya es una falta de interés en favor de la paz.
No podemos ser tan primitivos como los candidatos presidenciales, que en su inmadurez, incapacidad, mala fe, ignorancia y deseo de poder, sólo se dedican a criticar lo que el otro piensa y dice.
Vale la pena reflexionar varios puntos antes de aceptar o rechazar la sugerencia de una amnistía.
1.- Qué el candidato Andrés Manuel López Obrador presente por escrito su sugerencia de amnistía para que todos los mexicanos la conozcamos, de esta manera se le pueda rechazar, aceptar o enriquecer, y no quedarnos con frases fuera del contexto, como lo presentan Ricardo Anaya y Margarita Zavala en su propaganda política. Además nos permitiría conocer los pros y los contras para ver si se logra o no el objetivo que se busca: La paz en todo México.
2.- En dicho escrito debe quedar claro quiénes sí y quiénes no tendrían derecho a la amnistía. Se debe distinguir entre criminales incorregibles y corregibles, o entre lo que se gozan cometiendo delitos y lo que son obligados a cometerlos. Además sería sano preguntarnos si es posible lograr la amnistía con gente tan violenta, agresiva y trastornada psicológicamente como la que tiene en sus filas el crimen organizado.
3.- La amnistía no debe ser un acto de cobardía, traición, burla y deuda al pueblo y al gobierno mexicano, por lo que el ofensor debe resarcir el daño causado, además de que se deberán establecer las medidas concretas para enmendar el mal cometido.
4.- Se debe tomar en cuenta que hablar de amnistía puede ser un insulto para quienes han sido afectados en sus personas y en sus familias por la violencia, su opinión y sus experiencias son muy valiosas.
- La amnistía puede ser una alternativa para lograr la paz, pues ha quedado claro que desde el 11 de septiembre de 2006 -fecha en que se declaró la guerra al crimen organizado- la violencia sigue engendrando más violencia. Matar no ha solucionado nada y que cortar las cabezas a los cárteles sólo ha sido podarlas. ¿Sólo el uso de las armas, el castigo, la muerte y la cárcel pueden devolvernos la paz?, ¿acaso ya regresó la paz a nuestras ciudades, pueblos, rancherías y barrios?, ¿no hay otras soluciones más efectivas?
6.- Las leyes mexicanas permiten la amnistía, en este sentido, López Obrador no ha sugerido algo contrario a las leyes de México.
7.- Son varios los presidentes de México que se han valido de la amnistía para calmar las aguas violentas que se extendían por el País, como por ejemplo Benito Juárez, Sebastián de Lerdo de Tejada, Lázaro Cárdenas, Manuel Ávila Camacho, Luis Echevarría Álvarez, José López Portillo y Carlos Salinas de Gortari, por supuesto que cada uno en un contexto histórico diferente al actual y con resultados distintos.
8.- La propuesta de López Obrador requiere de las voces de especialistas en el tema, tanto nacionales como internacionales, y no de las zancadillas de sus rivales en la política.
9.- La opinión de intelectuales y académicos es necesaria en la búsqueda de otras alternativas para la paz, distintas a la amnistía, porque tampoco se trata de quedarnos encerrados en esta opción y menos en la opción violenta, que hasta la fecha no ha funcionado.
10.- La palabra amnistía viene del griego “amnestía”, literalmente significa “sin memoria”, olvido. La Academia Mexicana de la Lengua define este vocablo como “el hecho de perdonar ciertos delitos y de anular las penas correspondientes”. Amnistía, una palabra que no se nos debe hacer muy extraña, ¿acaso no hemos olvidado con mucha facilidad nuestra historia como mexicanos?, ¿acaso no olvidamos y perdonamos a tantos gobernantes corruptos y traidores?, ¿acaso no olvidamos la dictadura de partido vivida en poco más de 7 décadas, y después de dos sexenios no volvimos a caer en lo mismo?
Aclaración: No simpatizo con la coalición Juntos Haremos Historia ni con su candidato Andrés Manuel López Obrador, pero démosle la oportunidad que esta idea aparentemente descabellada la dé a conocer por escrito, porque de manera oral es muy lento para hacerlo y nos perdemos con tantos silencios. De esta manera se conocerá a fondo y el resto de los candidatos se verán obligados a analizarla con seriedad y no con la superficialidad con que lo hacen.
La agradezco el tiempo que brindó para leer estas líneas.
